Dirigido a un público joven (que no infantil), Runaways es una pequeña joya en el amplio mundo del cómic superheroico. Empezando por el dibujo, con unas preciosas portadas con un marcado estilo manga, nos encontramos con unos diseños más dinámicos y expresivos que el de los clásicos cómics de héroes, recordando más a unos dibujos animados que no a los típicos tebeos de tios supermusculados.
El guionista es Brian K. Vaughan, autor de otras geniales obras como Y el último hombre, Ex Machina, y otras más así como participaciones en diversas publicaciones. En esta ocasión plantea lo que parece ser la típica historia de adolescentes rebelados contra sus malvados padres, pero en cuanto avanzamos en la lectura vemos que tiene suficientes novedades y está más que bien escrita como para mantener el interés, planteando algunos cliffhanger de aupa.
Así que tenemos: chicos rebeldes con poderes, unos padres sin escrúpulos capaces de hacer cualquier cosa por su objetivo (y que a pesar de ser los malos,tienen cierto sentido retorcido en sus acciones), críticas al status quo - tanto al de ficción como al real - humor, algo de romance, continuas referencias a la música, cine y demás así como traición y muerte... Y todo eso en sólo 12 números, que son los que componen esta primera temporada, que pueden ser leidos sin que el lector tenga idea alguna de superheroes ni de su universo y que plantan diversas historias cortas aderezadas con una gran traca final. Genial, vamos. Mi única pega es que el final es un pelín forzado en mi opinión, pero aún así cierra excelentemente esta primera parte de la historia dejando a los personajes en una situación más que interesante para la segunda temporada... que no baja el listón.
Vamos, que hay que leerla!
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